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[joe]

en esta tarde, sentado en mi escritorio, sin saber nada que hacer, vivo... mi corazón palpita demasiado rápido para mí... voy a morir... lo siento... lo siento... sin embargo, es lo mas natural...

[joe]

dentro de poco visitaré las mas hermosa casa de los sueños... en ella viven todos mis anhelos, temores y viejas experiencias... no tengo mucho que buscar dentro de la casa de los sueños, pero es seguro que hay un regalo para mí... lo sé porque dentro de poco dormiré y soñaré cosas que no puedo imaginar...

[joe]

he bebido de las aguas del tiempo... cuando uno está frente a la muerte, uno se pone frío... sigo caminando y en espera de cualquier cosa... no imagino nada de nada... tan solo escribo notas que brotan en total libertad, así como mi propia vida...
siempre quise cosas hermosas... hoy por hoy veo las cosas hermosas en todos lados... hay un brillo que ciega todo entendimiento, y eso es el amor...
amo la existencia y si es así, hay algo en el aire que me hace existir...

[joe]

mi hermana envió mil poemas
mi madre grito el alma que carga
mi perro es un gitano con orejas heridas
mi padre está muerto desde que nací
mi laburo se halla mejor que muchos laburos
y peor que otros muchos
mi tiempo es un carril que amenaza el inicio de la eternidad
mi ser es un regalo, un prodigio de estupidez
mi literatura es de todo menos literatura
mi peor enemigo soy yo
mi mejor amigo está dentro de mí
perdido en las estepas de un alma oscura y fría
mi poema es como la realidad
suena a aullidos de lobo por las estepas...

[joe]

ya lejos de la esquina y recordando a papini, me puse a recordarle... tenía sus obras completas en mis manos... costaron lo que costaron... sij embargo, sentía que había algo mas en estos tiempos que los libros de autores grandes... miré sus hojas lentamente, sentado en un bello café a las seís de la tarde... una que otra persona pasaban por mi mesa... nadie se paraba frente a mí... parecían estar ciegos ante mi presencia... en verdad, no me gusta la soledad... pero me gusta la felicidad...
ciego como yo... sordo e idiota como yo... pienso que no existen muchas diferencias entre Giovanni y yo... le imaginé sentado frente a mí... sus ojos azules, sus lentes de lunas gruesas y de montura negra, me hicieron recordar a mi padre ya fallecido... ayúdame, le dije al maestro... me miró con sus muertos ojos y con una de sus manos empezó a acariciarme la cabeza, como si fuera su hijo... me sentí tan bien estando en esa forma que no dudé en llorar... gracias, le dije... y el ser imaginario de Giovanni empezó a desvanecerse... me paré, pagué la cuenta y noté que miles de hombres me seguían con la mirada... hasta llegar a mi auto y desparecer como siempre... llegué a mi casa, subí a mi cuarto y miré los libros que compré... abrí sus hojas nuevamente y empecé a olerlos profundamente, una y otra vez... y luego, sentí que todas las miradas del mundo estaban puestas en mi ser...

[joe]

siento que pierdo el tiempo... siento que he venido para algo mas importante que ser el mejor en todo... siento que mi alma llora por conectarme con ella... y sobre todas las cosas, temo los constantes cambios de mi vida...
miro el color del techo del cuarto... y siento que las moscas son mas afortunadas que yo...
sin embargo, aún siento que he nacido para algo muy importante... saber que camino rumbo a un destino claro es muy hermoso... saber que hay algo mas que las luces de este cuarto, el sonido uniforme del teléfono, el sonido y las imágenes de la TV... en fin, hay algo mas para mí, algo mas que sacar al perro, esperar el día de mañana, superar el temor al fallar...
y dentro de todo, siento que mi vida se aligera cuando escribo sin parar, sabiendo que la vida misma es mas que el café que tomaré mas tarde...
y si fuera un Papini... y si fuera de Florencia... y si nada de lo escribo sabe a dulce ni saldao... y si nada de esto no es mas que un sueño...
dentro de todo, siento que he nacido para escribir... porque, porque, soy tan feliz cuando lo hago... es como si el creador llenar el aire que respiro por amor, un amor puro y perfecto... que no es de carne, que no es mentira, que es algo mas que palabras... y dentro de todo ello, siento qhe he nacido para vivir plenamente, escogiendo lo mejor... y lo mejor que he encontrado es amar, y cuando escribo, siento que estoy amando...

[joe]

encontré a mi amigo con las orejas tapadas con sus dedos... tenía mas de noventa años... era un poeta... le toqué el hombro y él abrió sus ojos azules... le pregunté qué hacía... escucho de verdad, el silencio y dentro de ella misma, escucho el origen de todas las lenguas y sonidos... le pedí que me contase un poco mas... me dijo que el cuerpo es algo mas que carne, es un barco, un bote que nos lleva directo a la verdad... me dijo que hay algo mas que todo aquello que vemos y escuchamos y sentimos... me lo dijo todo, y todo con una amplia sonrisa... está loco, pensé... me despedí de él y salí de su hermosa casa... antes de salir, le miré y noté que su cuerpo caía como si fuera una capa escondida... no sé si murió, pero noté que de aquel cuerpo destilaba una especie de brillo especial... vi aquel brillo salir del cuerpo y viajar hasta perderse por los cielos... no quise saber más y seguí mi destino... apenas llegué a mi cuarto solitario, apagué las luces que emanaban de las ventanas y ya en plena oscuridad, me puse a escuchar el sonido del silencio... no sé porqué, pero sentí como una mano tocaba mi hombro... no quise hacerle caso y seguí escuchando el silencio...

[joe]

suelo vivir como todo mortal... amo el silencio cuando suenan las campanas de la realidad y cuando noto que el sueño rasca mi alma hago lo imposible... heme sentado el primero de todo los primeros, tratando de burlarme de mi propia estupidez mientras el mundo agoniza a mis pies... y todo el barro de la ceguera espiritual inunda como una mar de polvo con agua... y dentro de poco beberé de las aguas de este mundo porque mi garganta se hace un desierto... y por ello trato de vivir cada día... y por ello es que me duele el estómago luego de comer una cena cara y desagradable junto a la mujer que mas me ama... mientras los perros de todo el vecindario ladran en mi puerta como si fuera un ladrón lleno de heridas...
y allí están ustedes, personas que aman con locura esta vida... y allí estoy sentado frente a una computadora tratando de librarme de este foco infeccioso de la cordura...